El "brazo cataléptico" es utilizado generalmente como una prueba prehipnótica con el fin de lograr posteriormente un estado hipnótico más profundo.
También es un síntoma característico del “síndrome de abstinencia” en pacientes que estén en tratamiento para dejar la cocaína.
[6] La gravedad radica en que la persona puede ser sepultada estando aún con vida y despertar en cualquier momento.
Normalmente puede llegar a durar tres días, en los cuales la persona en estado de muerte aparente podría ser enterrada y despertar ya dentro del ataúd.
Entre 1870 y 1910 hubo un miedo generalizado a ser enterrado vivo, creándose los llamados "ataúdes de seguridad" con banderas o campanas.