Castro de Doña Palla

Estudios arqueológicos ponen de manifiesto que se trata de un enclave prerromano muy importante que, por su situación estratégica, también fue utilizado durante la época medieval.El Castro de Doña Palla, toma el nombre de la noble señora del siglo XI, gobernadora de Pravia, Pelaya o Paya Ordóñez, llamada Doña Palla, hija del infante Ordoño Ramírez «el Ciego», esposa del magnate asturiano Bermudo Armentáriz.[1]​ El matrimonio pasaron su Corte y palacio en el margen del río que se encuentra frente a Santianes.Al sur, zona de conexión con la falda del monte, existe un gran foso artificial.En la actualidad, se encuentra cubierto de monte bajo y de bosque, lo que dificulta la descripción detallada del yacimiento y sus estructuras.