Este es un sitio arqueológico junto al río Pontega, afluente del río Divor, que se remonta a la época de la invasión romana de la península ibérica.
Destaca una supuesta fortificación romana, que data del siglo I a. C. o incluso antes, con un plan cuadrangular, en bloques ciclópeos de sillería de granito, dispuestos en dos filas paralelas, constituyendo dobles vestimentas.
En los alrededores se han identificado materiales de construcción romanos, como tejas, ladrillos y sillares de granito en abundancia.
Un monumento, único en la región, está siendo estudiado por varios investigadores.
Asimismo, se está estudiando la clasificación de su protección por las autoridades públicas portuguesas.