La ladera queda cortada por el río Nysa Szalona, dejando un escarpado precipicio con una caída de 90 metros; por el lado oriental desciende gradualmente y queda ocupada por el pueblo.
[1] Las primeras menciones del castillo datan de 1277, durante el reinado de Bolesław II Rogatka, duque de Legnica, aunque la forma actual se debe a varias construcciones acometidas en el siglo XVI.
El arquitecto silesio Jakub Parr introdujo elementos renacentistas en las fortificaciones del castillo.
En 1703, el castillo fue adquirido por monjes cistercienses de Krzeszów.
Tras la laicización de las propiedades monásticas, el castillo pasó a manos públicas.