[2] The Washington Post mencionó casos sucedidos en Anzoátegui, Falcón, Lara, Mérida y Zulia,[3] aunque existen denuncias en al menos once estados de Venezuela.
[4] La Iglesia confirmó la veracidad del reportaje, admitiendo la existencia de casos de abuso ese mismo año, anunciando una investigación y acciones para prevenir abuso sexual en el futuro.
[7] La periodista Ana Vanessa Herrero, corresponsal del diario estadounidense The Washington Post realizó una entrevista donde se reunió con víctimas de acoso y abuso sexual eclesiástico, intentando entrevistarse con la Conferencia Episcopal Venezolana, que no atendió a sus solicitudes de entrevista.
[4] Según Herrero, existen denuncias en al menos once estados de Venezuela.
[6] Se evidenció la aplicación del «traslado terapéutico», utilizada en otros casos, donde sacerdotes con conductas inapropiadas y/o abusos probados fueron relocalizados en otras partes, en ocasiones otros países, para ocultar el pasado de los abusadores y evitar investigaciones policiales.
[3][8] Ese mismo año la Iglesia reconoció los sucesos y pidió disculpas al respecto, organizando una investigación al respecto, sin llegar a aclarar el número de víctimas y asegurando que se habían tomado medidas en represalia a los abusadores.