Está formado por unas células que se llaman condrocitos.
Las funciones de este cartílago son fundamentalmente: Para llevar a cabo estas dos funciones, el cartílago articular tiene una estructura característica: el cartílago articular es avascular (no tiene vasos sanguíneos ni linfáticos), se nutre por difusión pasiva desde el líquido sinovial y el hueso subcondral (este último mecanismo solo en cartílago joven), no tiene inervación (la percepción del dolor se realiza por las terminaciones nerviosas de la membrana sinovial, hueso subcondral, cápsula articular y músculo).
El cartílago está compuesto por una red de fibras de colágeno tipo II y proteoglucanos producidos por los condrocitos.
Los proteoglucanos son muy viscosos e hidrófilos, lo que produce una gran resistencia a la compresión.
Es una delgada capa de tejido elástico y resistente que recubre los extremos óseos e impide su roce directo para evitar el desgaste.