Fue favorito de Luis XIII gracias a su pasión común por la caza.
Con ellos hizo honor a las máximas del gran rey.
Se unió a los Grandes participando en el enfrentamiento que mantenían contra ella.
Tuvieron por hijo a Luis Carlos d'Albert de Luynes (1620-1699).
Luynes fue considerado como un pobre administrador, pero es posible que este calificativo se debiera a los escritos de la época firmados por el Cardenal Richelieu que tenía muchas y muy buenas razones para detestar a Luynes hasta el fin de sus días.