En la siguiente temporada, jugaría en los juveniles del Real Murcia.
[3] En la temporada 2012/13 tras renunciar el CD Guijuelo a jugar en Segunda B, el club madrileño cede al jugador al FC Cartagena para jugar en su tierra natal e intentar lograr el ascenso a la Segunda División, categoría recientemente perdida por el conjunto albinegro, y a la que intentan retornar.
Molina debuta con el conjunto cartagenero en la jornada 9, frente al Cádiz CF, en el Estadio Ramón de Carranza.
[4] Con el conjunto albinegro, termina la liga regular como subcampeón de grupo y el equipo cartagenero disputa las eliminatorias de ascenso a Segunda División.
[5] El portero se convertiría en una de las piezas clave del equipo salmantino durante las dos temporadas en la que estuvo, destacando un gol que anotaría en los anexos de Zorrilla frente al Real Valladolid B.