Carlos IV de rojo

Se conserva en el Museo del Prado, Madrid.

El rey se muestra desinteresado pero de buen humor.

A su izquierda se pueden distinguir los símbolos de realeza: la corona y el manto de armiño, mientras el fondo es una voluminosa cortina verde.

La firmeza de las pinceladas recuerda a Velázquez, en su faceta retratista.

El mismo año, el propio Goya hizo una copia un poco más grande para la Real Academia de Historia, donde continua.