Integró varios talleres literarios en los duros tiempos del conflicto bélico de El Salvador.
Durante una entrevista concedida en marzo de 2010 a un medio local, Soriano afirmó sobre su futuro como escritor: "quiero extender mis alas y volar hasta donde pueda".
Ha participado de muchos congresos literarios centroamericanos en varios países del istmo, al lado de plumas consagradas del área, destacando sus ponencias e intervenciones por la dureza y el sentido común con que ataca los problemas sociales, producto de los fallidos modelos económicos y sociales vigentes.
Los monólogos interiores están hechos con lenguaje rico y los diálogos entreverados tienen otro tono que permite advertir el léxico real".
Un libro de corte mágico, según el prólogo del mismo, donde los personajes fluctúan entre fantasía y realidad.