La población es conocida por el pintor barroco Caravaggio, quien vivió allí parte de su infancia y juventud y tomó el nombre del pueblo para su pseudónimo.
Su santuario, Nostra Signorona di Caravaggio, es bien conocido y fue construido después del hecho acaecido el 26 de mayo de 1432: se dice que a Giannetta, una joven que recogía hierba en el campo, se le apareció la Virgen María.
El agua trajo efectos beneficiosos para la población, y el santuario está construido encima de la fuente.
Actualmente es visitado por miles de peregrinos que van a beber del agua.
Su fecha data de la segunda mitad del siglo XIII.