En el origen del nombre de Cantalpino parece inevitable considerar la opinión según la cual los nombres de Cantalapiedra, Cantaracillo, Cantimpalos, Cantespino, Cansoles y similares contienen una forma proclítica *can ‘campo’, como ya señaló Julio González,[3][4][5] descartando como innecesaria la hipótesis prerromana (raíz *kanta- 'piedra, peñasco'), de la que Llorente era el más destacado valedor.Canta- en la antigua frontera entre Castilla y León, un hecho que ya había llamado la atención de A.[8] Julio González[3][4] interpretaba la toponimia de campo en la región allende el Duero como alusiva a terrenos fértiles, aptos para la labor, pero abandonados tras las guerras (“campos inicialmente incultos, no vinculados sólo para pastos”), que llamarían la atención de los ganaderos y caballeros repobladores en el s. X.No obstante, y sobre todo para los topónimos fronterizos, Riesco[5] sospecha en estos nombres una referencia más militar que agrícola, en la que *cam, *can estén por ‘campo de batalla, línea defensiva’.En otros casos, sin embargo, habrá de interpretarse campo en su acepción toponímica más común: tierra desarbolada, rasa.