Cancillería Apostólica
Desde la primera edad de la Iglesia, establecieron también los obispos sus Cancillerías, donde se expedían y autorizaban sus estatutos, bajo la dirección del Canciller y se conservaban archivados los originales.En esta oficina, el primer oficial, después del vice-canciller, es el regente al cual corresponde revisar las bulas, enmendar cualquier defecto de redacción y suscribirlas de su mano.El papel de cancellarius aparece por primera vez bajo Silvestre II.Desde Honorio III (1216-1227) en adelante, el jefe de la cancillería se llamó vicecancellarius.[3] Diccionario teológico, canónico, jurídico, litúrgico, bíblico, etc., Justo Donoso, 1855