Cambios de aire por hora

[1]​ Se expresa en m³/h, o en porcentaje de volumen renovado por hora.Generalmente se aplica a un espacio de un edificio de viviendas para analizar la habitabilidad (calidad del aire interior), en fábricas para determinar la desaparición de gases peligrosos, laboratorio, cocinas con los olores, locales cerrados como discotecas, etc.La renovación puede hacerse naturalmente mediante corrientes entre aberturas en paredes y cubiertas.[2]​ Este sistema de evaluar la ventilación es un sistema bastante anticuado y poco lógico, porque en locales con la misma necesidad de ventilación (mismo número de personas, iguales equipamientos), variaría mucho la ventilación resultante en función de la altura libre hasta el techo (del volumen del local).[3]​ Por estas razones se ha ido abandonando en las sucesivas normativas españolas (como en las de otros países).