La calle está dedicada al marino e inventor del siglo xvi Blasco de Garay, que presentó a Carlos I un sistema de propulsión por rueda de vapor.
[1] En el siglo xix formaba parte del barrio o núcleo de Vallehermoso; la escasa estima por las casas de corredor situadas en sus calles, además de la proximidad a diversos cementerios, dio mala fama a la zona en dicha época.
En su recorrido se cruza con las calles de Alberto Aguilera, Rodríguez San Pedro, Meléndez Valdés, Fernando el Católico, Pontevedra, Calle de Abdón Terradas, Fernández de los Ríos, Donoso Cortés, Joaquín María López, Cea Bermúdez y la avenida de Filipinas.
En ella se encuentra la iglesia del Santísimo Cristo de la Victoria, construida en 1946.
Su edificio anexo es el Monasterio de San José y Jesús María.