Morales Morante (2014) fija en tres los parámetros para definir la calidad de emisión o, si se quiere, la norma para generar una señal de televisión con calidad suficiente: Quedarían otros parámetros más relacionados con la señal en sí, como la banda donde se emite o la frecuencia asignada.Pero el antiguo mundo del celuloide evolucionó también con el cambio de siglo hacia la resolución 8k, por tanto el autor prevé una evolución de la calidad televisiva hacia esa nueva resolución, conocida como UHD por Ultra Hight Definition por sus siglas en inglés.Técnicamente dicha evolución será posible gracias a la potencia de procesamiento en los equipos profesionales y domésticos; pero el académico también afirma que los intereses comerciales harán muy difícil una misma y deseable norma que unifique tanto el cine como la televisión.Nicholas Negroponte (1995) discrepa respecto al futuro de la televisión como tal.Reconoce que las mejoras en la calidad han aplazado el final de la televisión; pero, gracias al aumento considerable del ancho de banda conseguido con la fibra óptica, el futuro será la señal desde Internet, especialmente cuando algunas empresas comenzaron a ofrecer contenidos a los hogares en 4K.