Por su parte, Lucía y Patricia normalmente tienen buena relación, aunque también ellas chocan por diferentes cuestiones en algunos episodios.
También entre los hijos de los Valero y los Espinosa se dan roces, tanto positivos como negativos.
Por su parte, Candela y Eva mantienen una gran amistad a lo largo de toda la serie.
Los roces, malentendidos y conflictos entre ambas familias centran el hilo argumental de la serie, siempre desde la perspectiva del humor.
Si dos quieren, dos discuten: Los dos cabezas de familia se enfrentan agriamente y sus dos mujeres inventan una estratagema para intentar reconciliarlos.
El príncipe azul que yo soñé: Lucía y Patricia se hacen confidencias.
Este negocio es una ruina: Julio consigue, no se sabe cómo, convencer a Ramón para montar juntos un club nocturno.
Ramón, aunque se niegue a reconocerlo, sufre un inesperado ataque de celos filiales y acaba peleándose con su padre.
Esto no es Hollywood: El abuelo se ha enamorado y habrá boda a estas alturas.
Que viva España: A Julio le han concedido la nacionalidad española.
El hombre, loco de alegría, se prepara concienzudamente para jurar la constitución.
Lucía cree descubrir que Ramón, su marido, se siente atraído por su vecina Patricia.
Moncho lleva a casa un extraño y nuevo amigo, despertando las sospechas de todos.
Parece que a Lucía le han entrado de repente unas ganas terribles de ser madre otra vez y a Ramón no le gusta nada la idea.