[3] La obra fue concebida como "una metáfora de lo que representa Naciones Unidas", en opinión del Miquel Barceló.
[6] Ocupa 1.400 metros cuadrados y fueron necesarios 35.000 kilos de pintura.
[4] Para modernizar el Palacio de Naciones se pidieron donaciones a los países miembros, ya que es un edificio viejo que necesita una gran renovación.
España fue de los primeros en contribuir con una sala multifuncional, a la vez que simbólica y artística.
[12] Por ello, el Partido Popular quiso reprobar al ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, por usar medio millón de euros del Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD) para costear la bóveda.
[14][1] Pero la ONU lo desmintió en una nota oficial y con una visita de periodistas a los pocos días, y la infinidad de eventos y las visitas multitudinarias posteriores a la Sala han acabado por confirmar la falsedad de los rumores.