También describe los buscadores de oro norteamericanos que durante las fiebres del oro del siglo XIX exploraban el terreno de Estados Unidos y Canadá.
Los gambusinos que acudieron a las fiebres del oro no estaban entrenados para reconocer el mineral o las zonas de riqueza potencial, por lo que dependían en gran medida de su suerte.
La selección se hacía visualmente, utilizando una criba para separar la arena y otros minerales.
Cuando se agotó el oro de los ríos, los gambusinos comenzaron a asociarse para explorar otras fuentes del mineral, recurriendo a la minería tradicional y desarrollando técnicas como la minería hidráulica.
El origen etimológico es incierto, la hipótesis más plausible es que se deriva de gamusino.