Las estudiantes gritan aterrorizadas cuando oyen el nombre y huyen del salón de clases cuando ven a la profesora Lee hablando con Kim In-Sook.
Las investigaciones avanzan pronto al encontrar a otros tres acosadores muertos de la misma manera.
Aquí, Yoo-Jin comienza a sospechar que el espíritu de Kim In-Sook quiere poseerla.
Las cosas se ponen peor cuando la maestra es poseída por la madre de Kim In-Sook, Chun Hee.
Según la investigación policial, hace treinta años Chun Hee y Kim In-Sook habían llegado al pueblo desde muy lejos.