El término usado en inglés es Bug Tracking System, y frecuentemente se usa el acrónimo BTS.
Son usados intensivamente por cualquier empresa o institución que realice desarrollo de software.
Los hechos pueden ser una descripción detallada del fallo, la severidad del evento, forma de reproducirlo y los programadores que intervienen en su solución así como información relacionada al proceso de administración de la corrección del fallo como puede ser personal asignado, fecha probable de remedio y código que corrige el problema.
De la misma manera, son regularmente configurables para permitir que diferentes personas consulten o editen diferentes aspectos del reporte, así como permitir a los administradores clasificar los diferentes estados del problema.
Sin embargo, esto puede a veces producir resultados inexactos debido a que diferentes errores pueden tener diferentes niveles de gravedad y complejidad.