Tanto las larvas como los adultos se alimentan de semillas.
Los adultos miden de 2-3,5 mm y nacen en primavera.
[4] Para que las larvas no perforen las lentejas parasitadas es preciso matarlas mediante la fumigación, por ejemplo con bobulina.
Se trata, normalmente, de personas que habían estado expuestas a un contacto continuado con el parásito debido a su ocupación como agricultores, ganaderos, ingenieros agrónomos y cocineros.
La lenteja es una de las legumbres que produce alergia con más frecuencia, sobre todo en los niños; su incidencia va en aumento.