El Bristol Football Club tuvo su origen en los inicios del siglo XX.
Fue considerado un club elitista, debido a que defendían que el fútbol siguiera siendo amateur, principalmente para no incorporar otras clases sociales a la práctica hasta entonces ociosa de este deporte.
[3] En el partido del 15 de octubre frente a los albos, Bristol alineó 10 jugadores del once inicial que eran ex-Nacional: Caserza, Novoa, Carbone, Pacheco, Durán, Zuazu, Friederich, Ferreiro, Pena y Campisteguy.
Finalmente, el equipo nunca pudo lograr contar con el respaldo de los aficionados.
El escaso apoyo y su mal rendimiento supuso la desaparición del club.