[2] Desde su puesto en la administración estuvo presente en la redacción de los primeros proyectos técnicos del reinado isabelino para incrementar la escasa producción de la agricultura.
Junto a Pascual Asensio y Agustín Pascual, fue corredactor del proyecto que dio nacimiento a la Escuela Central de Agricultura en 1855,[2] de la mano del ministro Manuel Alonso Martínez y que tuvo su sede en la huerta de Aranjuez hasta 1868.
En la Escuela se formaron los primeros ingenieros agrónomos, peritos y capataces agrícolas españoles.
Dirigió la organización de la primera Exposición de Agricultura que tuvo lugar en 1857 en la Montaña del Príncipe Pío en Madrid, redactando la memoria de la misma.
También publicó algunos relatos menores y novelas, en este caso bajo los seudónimos de Perico entre ellas o Periquito entre ellas.