Masacre de Boston

En medio de la confusión, se escuchó la orden “no disparar” emitida por el capitán Preston.

Uno de los militares, el soldado de primera Hugh Montgomery, cayó al suelo debido a un golpe, lo que le llevó a disparar “accidentalmente” al aire su mosquete.

(Más tarde, sin embargo, admitiría que disparó deliberadamente a la muchedumbre).

Seis de los soldados fueron hallados no culpables y otros dos -los dos únicos que se comprobó que habían cargado dos veces sus mosquetes-, Hugh Montgomery y Matthew Killroy, fueron encontrados culpables de homicidio involuntario, lo cual se penaba realizando una marca en el pulgar.

Para los británicos, este suceso se conoció como el incidente de King Street.

Marca en el lugar de la masacre.
Estela sobre las víctimas de la masacre en el Granary Burying Ground