[2][3][4] El que fuera gobernador del estado de Oyo, Abiola Ajimobi, visitó el bosque después de que fuera descubierto.
[5] En la zona se encontró un edificio con varios artículos, incluida ropa para niños y adultos, tapetes y otros elementos usados en el hogar.
[6] Se creyó que las actividades que ocurrieron en el bosque fueron coordinadas por secuestradores desconocidos y por asesinatos ritualistas y de magia negra que a menudo eran patrocinadas por personas, apuntaban en ese momento, ligadas a las altas esferas que usaban la carne humana como parte de rituales.
[7] El descubrimiento generó reacciones de controversia, indignación y miedo en toda Nigeria, planteando dudas sobre la seguridad del Estado y la necesidad de fortalecerlo.
[8] Hubo una preocupación sobre el vínculo entre el manejo (secuestradores y ritualistas) del bosque y algunos altos funcionarios del gobierno y políticos notables en el estado, pero no se pudo demostrar que estuvieran relacionados con tal hecho.