Bosque Urbano de Palma
A principios del siglo XXI el Ayuntamiento de Palma comenzó a planificar la construcción de un extenso parque ciudadano denominado la Cuña Verde (en catalán: sa Falca Verda) en unos terrenos donde hacía décadas que se preveía su construcción.[1] En 2002 se aprobó el proyecto diseñado por el arquitecto Manuel Ribas Piera[2] que preveía varias fases de ejecución, una de las cuales comprendía el canódromo y el velódromo y preveía la sustitución de las antiguas estructuras deportivas existentes para una nueva urbanización, similar al diseño del resto del parque.[10] Las obras no dieron inicio en el plazo previsto y el 14 de febrero de 2017 el proyecto se volvió a presentar, ahora dividido en dos fases y que comenzaría a ejecutarse en los terrenos del canódromo.En la primera fase del parque, correspondiente al canódromo, se han plantado 280 árboles: almeces, arces, chopos, cipreses, encinas, olivos, olmos, pinos y robles, además de plantar arbustos como césped, laurel, madroño, mata y retama, entre otros.[19] Todo el parque estará atravesado por el torrente de la Riera y para comunicar las dos partes del bosque urbano se habilitarán dos pasarelas.