Primaba en los puños, faldas y cuellos de las jóvenes, dándoles un aire alegre debido a sus vistosos colores.
A pesar de las ventajas que ofrece esta posibilidad, varias publicaciones españolas dan la alternativa de trabajar en tela aida, pero como no es imposible seguir su entramado, se procede a utilizar los puntos libres (agujeros) del tejido.
Esta regla se aplica a todas los hilos que constituyen el motivo del bordado.
En todo lo referente a las labores (encaje, costura, bordado, etc.) se suelen preferir una serie de materiales antes que otros por su resistencia, textura o acabado.
Por su sencillez y vistosidad, el punto yugoslavo es usado, como ya se aclaró, fundamentalmente en ropa de hogar.