Tras la guerra, decidió permanecer en Rusia, y se casó con una aristócrata perteneciente a una familia de la nobleza, los Tukhachevsky.
[1] Durante la juventud de Borís, su familia pasaba los veranos en los Alpes, donde se aficionó al montañismo.
Tras la Revolución rusa, escaló montañas en el Cáucaso y en el macizo de Altái.
Borís Delaunay trabajó en el campo del álgebra abstracta, la geometría de los números.
[4] Entre sus alumnos destacados figuran los matemáticos Aleksandr Aleksándrov e Ígor Shafarévich.