Para poder avanzar en el juego, desde un principio se otorga un animal sagrado gigante, que puede ser una vaca, un mono, un lobo, o un león.
Cada uno tiene unas características propias: por ejemplo, la vaca solo come grano, pero no aldeanos, y el mono aprende más rápido las órdenes que le des.
Después se llega a la gran civilización griega, que los aztecas derribarán y harán cenizas.
Al haber recuperado las tierras de Grecia y su poder, el juego permite continuar en esa isla haciendo trabajos con libertad como seguir construyendo y haciendo una enorme metrópolis, o comenzar tu aventura de nuevo con el pergamino dorado en la que podrás elegir una nueva mascota.
Esto fue introducido como sneak peek de la expansión Black & White 2: Battle of the Gods, en la que te enfrentas a un dios no-muerto con una voz similar.