Un billete espécimen (del latín specimen que significa ejemplar visible o modelo)[1] se imprime generalmente en cantidades muy limitadas, para ser distribuidos a los bancos centrales internacionales, bancos comerciales nacionales, impresoras de billetes (como la American Bank Note Company) o incluso a las empresas comerciales, con el propósito de facilitar el reconocimiento de los nuevos billetes.
Para evitar el uso de billetes especímenes como billetes de curso legal, las muestras se sobreimprimen y/o perforan con la una inscripción como «SPECIMEN», «ESPECIMEN» o «MUESTRA SIN VALOR».
Muchos ejemplares tienen un "número de control" adicional que se utiliza por un banco central para rastrear quien recibió un espécimen particular.
[2] Los Bancos Centrales entregan estos billetes especímenes en calidad de préstamo.
Dichos billetes pueden llegar a los coleccionistas sin autorización, aunque en algunos casos, pueden ser ampliamente distribuidos, y debido a que no tienen ningún valor comercial, pueden valer menos que los billetes en circulación.