Las bicicletas estáticas se utilizan para hacer ejercicio, para mejorar la forma física general, para perder peso y para entrenar en eventos de ciclismo.
La bicicleta estática se utiliza desde hace tiempo para la fisioterapia debido al ejercicio cardiovascular de bajo impacto, seguro y efectivo que proporciona.
Los ergómetros modernos e incluso muchas bicicletas estáticas de consumo están equipadas con sensores electrónicos y pantallas.
Este se realiza por la fricción o resistencia aplicada a una rueda de inercia metálica mediante una acción manual.
Este sistema ofrece las ventajas del freno magnético más mayor precisión, fluidez, y control realizado por la consola electrónica.