En béisbol, la regla del bateador designado es el nombre común para la regla 6.10 de las Grandes Ligas de Béisbol,[1] una posición oficial adoptada por la Liga Americana en 1973 y la Liga Nacional en el 2022, que permite a los equipos designar un jugador, conocido como el bateador designado (abreviado en inglés DH), para batear en lugar del pitcher.
La regla estipula lo siguiente: Un bateador puede ser designado para batear en sustitución del pitcher abridor y todos los pitchers subsecuentes en cualquier juego, sin afectar de ninguna manera la situación del o de los pitchers durante el encuentro.
No pueden efectuarse sustituciones múltiples que alteren la rotación de bateo del Bateador Designado.
Una vez que un bateador emergente entra a batear por cualquier jugador en el orden al bate y luego entra a pitchear, se termina la actuación del Bateador Designado por el resto del juego.
En el caso de que un pitcher sea expulsado del juego el bateador designado deberá cubrir la posición del pitcher para poder ingresar al campo como un jugador y desaparece el bateador designado.