Las tropas urgelistas fueron derrotadas en la batalla de Alcolea de Cinca por las tropas reales.
El fracaso en el asedio de Lérida, a pesar de la victoria en el combate de Margalef imposibilitó reunir los ejércitos del condado de Urgel y de Aragón.
Mientras Antón de Luna se refugiaba en el castillo de Loarre, Jaime II de Urgel se refugió en Balaguer a la espera de la ayuda inglesa.
La batalla acabó con la rendición del conde al rey el 31 de octubre de 1413.
El castillo de Loarre cayó a principios de 1414, dándose por sofocada la revuelta.