El balance de materia es un método matemático utilizado principalmente en ingeniería química.
Los términos de producción y acumulación pueden ser tanto positivos como negativos.
En estos sistemas en estado estacionario el término acumulación desaparece, simplificándose la ecuación a la siguiente:
En los casos más simples, el interior del sistema se considera homogéneo (perfectamente mezclado).
Para poder hacer un balance integral de materia, primero se deben identificar los límites del sistema, es decir, cómo el sistema está conectado al resto del mundo y cómo el resto del mundo afecta al sistema.