Según lo explica la banda en el libreto que acompaña al CD, es una referencia a aquellos "bagayos mal atados que uno lleva donde va, cosas de gente con sangre caliente, de verdad".
[2] Después del impulso conseguido con su debut Mbugi, los miembros de La Mississippi se atrevieron a alejarse de la ortodoxia del blues, incursionando en historias verdaderas, cercanas y, principalmente, contadas en español.
Como curiosidad, cierra con el poema «Nocturno a mi barrio» de Aníbal Troilo, en el primer acercamiento del grupo con el tango.
Bagayo fue certificado Disco de Oro y muchas de sus canciones se han convertido en clásicos,[3] y continúan siendo hasta hoy prácticamente ineludibles cada vez que el grupo sube a un escenario.
[4] Entre ellas se destacan «Blues del equipaje», «Mala transa», «Por fin te fuiste Mabel» y «Un trago para ver mejor».