Baal I

Sidón es arrasada y se construye una nueva ciudad llamada Kar-Assarhaddon en su sitio.

Baal, atrincherado en la isla de Tiro, escapa del cautiverio pero pierde todas sus posesiones y debe someterse.

Deben proporcionar un contingente y barcos al ejército asirio que ataca a Egipto.

Baal I se somete nuevamente: envió a su hijo llamado Yahimilki y a su hija y sobrinas como rehenes del rey asirio.

Este magnánimo guarda princesas para su harén pero devuelve a Baal I sus hijos.