La película narra el despertar de Fer junto a su novia, Pavloba, en un aparente día normal.
Mirando por la ventana del salón, Fer ve en la calle a un hombre con una barra de pan bajo el brazo.
Roberto dice que cuando no te quieren lo mejor es escapar, Ángela se enfada con este comentario y decide ir al baño.
Aparece Pavloba, su taza de café vuelve a caerse y romperse, Fer se extraña.
Pavloba discute con Fer, revelando que ella le ha sido infiel con Montalbán, rompiendo su relación.
En la cena, Fer está absorto, con la mirada perdida y con la barra de pan robada bajo el brazo, mientras los demás hablan.
En otro momento de desesperación, Fer propina un puñetazo a Montalbán, Pavloba se enfada y le grita que su relación ha terminado.
Oculta ridículamente la taza, que ella encuentra, volviendo a caer y romperse.
Fer, visiblemente aturdido por la situación, mira por la ventana y ve que el hombre de la calle pasa otra vez con un pan diferente bajo el brazo, esta vez pan de molde.
Antes de que Pavloba diga nada, Fer decide tomar un descanso y enciende un cigarrillo.