[1][2][3] La receta sigue teniendo cierta continuidad, aunque ya no es tan común como antaño.
Una variante con cebada es llamada ordinate[4] ordiate u hordiate.
Se mezcla la leche de almendras con harina o copos de avena hasta quedar homogéneo, se pone al fuego y cuando rompe a hervir se le agrega azúcar al gusto.
Se deja cocer una hora y media a fuego lento, removiendo de vez en cuando.
Se sirve frío, como refresco, en un cuenco y espolvoreado con azúcar.