Autovía del Camino Catalán

La autovía del Camino Catalán o A-22[1]​ tiene su origen en Lérida, conectando con la autopista AP-2 y las autovías A-2, A-14 y A-27 y finalizará en Huesca cuando se complete la construcción de su último tramo desde Siétamo a Huesca, actualmente en obras, donde conectará con la A-23.

La autovía fue incluida en el PIT 2000-2007 del Partido Popular, pero la obra acumuló un gran retraso y en el año 2004, en la mayoría de los tramos no había ni proyecto de construcción.

Después del cambio de Gobierno, fue incluida en el PEIT 2005-2020 por el Partido Socialista.

El subtramo Huesca-Siétamo, debido a su cercanía al Castillo de Montearagón y por producirse un fuerte debate social y político entre los Ayuntamientos de Quicena y Huesca sobre el corredor elegido para la autovía en esa zona, fue segregado del Estudio Informativo y de la correspondiente DIA, por lo que se ha retrasado mucho en su tramitación administrativa y será el último en ejecutarse.

Hicieron falta años de espera para que el organismo estatal firmara el contrato licitado anteriormente con la constructora aragonesa Vidal y la catalana Copcisa para construir los que al final serían 12,8 kilómetros y en los cuales se unirían finalmente las autovías A-22 y A-23 con dirección a Zaragoza y Jaca.

Mapa del trazado de la autovía A-22 en el tramo Huesca-Siétamo