Fue hijo de Joaquín Silva e Ignacia Álvarez Tostado.
A los veinticinco años de edad, fue cura en Ciudad Guzmán, lugar en donde fundó un observatorio.
En 1880 fue nombrado párroco de la misma plaza.
En 1883, fue prebendado en la Catedral de Guadalajara, durante su canonjía fundó asilos de beneficencia y algunas otras instituciones religiosas.
Por su obra fue conocido como el "Padre de los pobres".