[3][4] Estados Unidos y el Reino Unido afirmaron que los ataques estaban dirigidos a miembros del grupo rebelde hutí; sin embargo, los hutíes afirmaron que todos los muertos o heridos en los ataques eran civiles.
Así mismo afirmó que «Nos estamos preparando para una cuarta fase de escalada si el enemigo israelí y los estadounidenses continúan con su intransigencia».
[19] Según indicó en un comunicado el portavoz de los rebeldes, Yahya Sarea, los bombardeos alcanzaron puntos de Hodeida —donde se han registrado todas las víctimas—, Taiz y la capital, Saná, también afirmó que entre los «mártires» hay civiles.
[6] Un trabajador del hospital de Hodeidah dijo que entre las víctimas había militantes, pero no especificó el número exacto.
[1] En este sentido afirmaron que «las Fuerzas Armadas yemeníes no dudarán a la hora de responder de forma directa e inmediata a cualquier nueva agresión contra territorio yemení atacando todas las fuentes de amenazas y objetivos hostiles estadounidenses y británicos en el mar Rojo y el mar Arábigo».
[6] El portavoz hutí, Mohamed Abdelsalam, calificó los ataques como una «agresión brutal» hacia Yemen por respaldar y brindar apoyo a Gaza en la guerra contra Israel.
Las operaciones continuarán hasta que la agresión termine y se levante el cerco contra el oprimido pueblo palestino en la Franja de Gaza».