Asesinato de los hermanos Smith

Joseph Smith y su hermano poseían sólo una pequeña pistola de bajo calibre oculto en sus vestimentas.

Ante la embestida a la fuerza de la puerta, tanto los hermanos Smith como Willard Richards y Taylor intentaron contener la puerta de la habitación donde estaban detenidos, Taylor usando un bastón golpeó varias manos armadas que asomaron y arrebataron una pistola de 6 tiros que se asomó entre las embestidas.

Acabada la munición, nuevamente la turba embistió la puerta abriéndola violentamente, la puerta ocultó de fortuna a Willard Richard, John Taylor intentó saltar por la ventana, al asomar al marco recibió una bala en la pierna y otra contra su pecho que detuvo un reloj de bolsillo, el impulso de la bala lo hizo rodar hacía adentro bajo un camastro mientras la turba ingresaba a la habitación disparando, Joseph Smith intentó lanzarse desde la misma ventana al vacío exclamando: -¡¡Oh Señor, Dios mio!

!- recibiendo un balazo por la espalda y otro impacto desde fuera, cayendo muerto junto a un pozo.

Taylor herido bajo el camastro vio súbitamente retirarse a la turba diciendo: -¡Ahí vienen los mormones!-.

Taylor logró sobrevivir con cuatro disparos en el cuerpo, Willard Richards resultó proverbialmente ileso al no ser descubierto por la turba.

Ambas denominaciones, la mayoritaria en el Estado de Utah y otra en Kirtland, Ohio coexisten armónicamente hasta hoy.

Representación del asesinato de Joseph Smith en junio de 1844
Joseph Smith (fotografía de 1843).
Hyrum Smith, hermano de Joseph Smith.
Gobernador de Illinois, Thomas Ford quien influyó en la muerte de los hermanos Smith.