Asado con cuero

Al parecer, los indígenas cocinaban la carne con esta técnica pues si debían huir, podían envolver la carne rápidamente montándola sobre un caballo, sin perder las reservas de comida para la tribu.

[1]​ Algunos consideran este método un auténtico arte que se ha ido perfeccionando con diferentes técnicas.

Luego de la faena, el animal es cortado en cuartos sin quitarle el cuero y se deja orear toda la noche.

El animal es puesto sobre la parrilla con los pelos y el cuero hacia arriba, comenzando el proceso muy temprano en la mañana.

También se puede dar vuelta la carne para dejar tostar la parte que contiene el pelo, pero esto varía de acuerdo a las costumbres y tradición del lugar.