Artroplastia inversa de hombro

[4]​ Históricamente, la principal razón para llevar a cabo una artroplastia inversa de hombro era tratar la artropatía ocasionada por el desgarro del manguito rotador, que implica una artritis glenohumeral avanzada junto a un desgarro extenso del manguito rotador.

Los huesos nativos del húmero y la escápula se preparan mediante un mecanizado preciso para alojar sus respectivos implantes.

Al final del procedimiento, el músculo subescapular es típicamente reparado, aunque algunos cirujanos abogan por no reparar este músculo debido al exceso de tensión que se ejerce sobre él debido a la mecánica alterada del diseño de hombro invertido.

Además, está presente un componente metálico redondeado llamado "glenosfera", el cual se conecta a la placa base mediante diversos mecanismos.

[5]​ Aunque muchos pacientes experimentan mejoras clínicas notables mediante este método, aquellos con desgarros extensos del manguito rotador han presentado consistentemente resultados insatisfactorios debido a la pérdida de estabilidad proporcionada por estos músculos.

[12]​ Desafortunadamente, su diseño resultó en varios fracasos iniciales, lo que lo llevó a abandonar este concepto.

Músculo pectoral mayor
Radiografías simples en vista anteroposterior (AP) de hombros izquierdos en estado post artroplastia inversa de hombro utilizando tres iteraciones de diseño cada una con un ángulo cuello-eje de 135 grados y centro de rotación lateralizado.