La articulación sacro-ilíaca o sacroilíaca (a menudo abreviada como ASI o SI) es una articulación que se halla entre el hueso sacro y la porción ilíaca del hueso coxal de la pelvis, firmemente reforzada por varios ligamentos.
Al ser más profundos, se encuentran totalmente tapados por los ligamentos sacroilíacos posteriores.
[7] El complejo ligamentario contribuye a mantener al hueso sacro encajado en el anillo pelviano en bipedestación y evita el deslizamiento del hueso sacro hacia el interior de la cavidad pelviana.
Además, los ligamentos sacroespinosos y sacrotuberosos proporcionan una fijación adicional para ambas articulaciones e impiden que la pelvis bascule hacia atrás.
[7] En la evaluación clínica, se puede utilizar distintos tests para reproducir el dolor sacro-ilíaco del paciente.
Esta suele manifestarse como dolor referido en la cara posterior de la nalga, en la zona glútea o en la columna lumbar.
Aunque es relativamente infrecuente, este dolor suele deberse a la presencia de enfermedades crónicas degenerativas como espondilitis anquilosante o artrosis.