Aral (Kazajistán)

Inicialmente era una ciudad portuaria a orillas del mar de Aral; sin embargo, desde 1960, cuando los ríos Amu Daria y Sir Daria (que alimentaban dicho mar) fueron desviados para convertir Asia Central en una zona productora de algodón y cereales, el nivel del mar comenzó a bajar.

Al igual que Moynaq, al lado uzbeko del mar, la población de Aral comenzó a descender, y sus habitantes comenzaron a sufrir diversas enfermedades derivadas de la creciente salinidad y radicalidad del clima (con temperaturas que llegaban a mayores y menores extremos).

Desde octubre de 2003, el gobierno construyó una gran presa de cemento, el dique Kokaral, para separar las dos mitades del mar de Aral y el nivel del agua ha ido aumentando en ese trozo del norte del mar original, reduciéndose los niveles de salinidad y recuperándose la pesca.

Si bien en los peores momentos, en que la situación parecía de desaparición total inminente, la ciudad llegó a estar a 100 km de distancia de la línea de costa - en la que antes tenía puerto propio - la situación a finales de 2009 había conseguido mejorar notablemente y para el año 2017 la costa ya estaba sólo a unos 20 kilómetros de la ciudad,[2]​ incluso llegando a acercarse a los 10 en determinadas fechas concretas.

Sin duda el mar de Aral no volverá a ser nunca lo que fue, pero sí se vislumbra una esperanza para este puerto pesquero y sus alrededores gracias al dique propiciado por su gobierno y las ayudas internacionales.