Jugó como anfitrión en el Estadio Olímpico del Complejo Deportivo del eje citadino Barcelona-Puerto La Cruz, inaugurado el 8 de diciembre de 1965 y tras su reconstrucción fue denominado Estadio José Antonio Anzoátegui.
Gino Giannone (1969), otro reconocido comerciante de la época en la localidad porteña, quien luego cedió la presidencia del club a Vincenzo Forcella.
El nuevo presidente, como aficionado del italiano Juventus de Turín, acabó con la era verde y blanca, para emular ahora el uniforme tradicional del conjunto turinés con su eternas rayas verticales en blanco y negro.
El cristalizado sueño del empresario hispano-venezolano se estrenó con una indumentaria idéntica a la de su adorado Real Betis, sencillamente para él no existían otros colores y no podía ser de otra manera.
En su siguiente duelo, visitaron al Galicia del tigrense David Mota y el arranque soñado se convirtió en el primer paso de una larga pesadilla, ese día (8-4-1967) fueron superados categóricamente con marcador de 3-0 en la capital.
Anzoátegui se adjudicó un par de victorias (1-0) que le sirvieron para maquillar una desastrosa zafra de debut y ocupar el séptimo peldaño entre los ocho equipos que completaron la campaña.
Su ofensiva fue la tercera más productiva con 51 goles, detrás del campeón Deportivo Portugués (67) y Lara FC (61).
Debió esperar las primeras siete jornadas (todas derrotas, con solo dos goles anotados y 19 encajados) para conquistar su primer triunfo y a domicilio, el 22 de mayo de 1968 al lograr una maravillosa remontada e imponerse 3-2 en casa del Deportivo Galicia en Caracas.
El segundo peor del circuito fue Lara FC (26) con nueve dianas más en su haber.
El formato del circuito nacional regresó al calendario largo, que incluyó cuatro vueltas, y que sufrió la desaparición de Litoral FC para dejar a nueve integrantes en la clasificación criolla.
En esta temporada llegó a sus filas un joven centrocampista uruguayo Aníbal Ruiz "Maño", quien estuvo en la plantilla hasta la campaña siguiente (1970), así como también su futura estrella goleadora Francisco Rodríguez "Francisquito".
El Mundial de México 1970 obligó la suspensión del circuito nacional durante 21 días, entre julio y agosto, que afectó la segunda vuelta de la Primera Fase del campeonato venezolano profesional.
Solo 10 puntos en 14 partidos parecía marginar nuevamente a los orientales, aunque la incorporación de Nelinho por el lateral izquierdo, para combinarse con Rubén Darío Torres en la otra banda permitió blindar a la zaga porteña.
El punto más bajo llegó en la parte final de la temporada al no disputarse su partido de la penúltima fecha frente al Deportivo Portugués en Barcelona y por el que decidió no viajar a Mérida en la última jornada, para perder por Forfeit y concluir una campaña para el olvido.