El estallido de la Guerra Civil le obligó a interrumpir sus estudios.
En 1948 se desplazó a Madrid, exponiendo con otros cuatro artistas en la galería Buchoz hasta 1951.
Su pintura parte del expresionismo, y evoluciona hasta el figurativismo de su madurez.
Fue colaborador del arquitecto Fernández del Amo en el Plan del Instituto Nacional de Colonización, realizando varias vidrieras para iglesias de Madrid, Lérida , Huesca y Valladolid.
Sus cuadros son piezas muy cotizadas,sobre todo el periodo comprendido entre los años 50 y 60 del siglo XX, en su etapa retratando infantes.