Hijo único de Francesco Canale y Caterina Morando.
Con la ayuda del hermano de su padrino, el monseñor Rodolfo Brignole Sale, se instaló en Roma, en búsqueda de una congregación religiosa.
Desde 1840 ocupó el cargo de procurador general.
Además de esto, en el campo espiritual, se empeñó y consiguió la canonización del entonces beato Miguel de los Santos.
Consiguió también una importante reliquia de san Juan de Mata y el cuerpo de la beata Ana María Taigi, que aún hoy se veneran en la basílica de San Crisógono en Roma.